
El columpio….
Después de votar hace dos semanas atrás, mientras estaba esperando que mi amiga me recogiera para que comieramos juntas, decidí montarme en el columpio por un rato. Mientras estaba en el columpio, me sentí como una niña de nuevo. Siempre me encantó los columpios y el estar en uno me recordó de qué tan libre de preocupaciones estamos como niños, libre de miedo, qué tan atrevidos y persistentes somos cuando niños. De alguna manera según uno se va poniendo más viejo, aprendemos